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La Paz, Baja California Sur.- Después que Baja Ferries anunciara la inversión realizada en la renovación de la flota marítima con “barcos veloces” de más de 182 millones de pesos, Óscar Ruano Baqueiro, director ejecutivo de la empresa naviera fue cuestionado sobre la inversión que necesita la carretera La Paz-Pichilingue en cuestiones de seguridad y cuánto estarían dispuestos a invertir en ello.

Aunque señaló que los millones invertidos a su empresa “son para mejorar el servicio al pasajero”, no comprometió una inversión en conjunto con las autoridades locales en dicho tema pese a que son la empresa que más se ha beneficiado del dinero público -de los gobiernos-.

“Estamos en el mismo canal. El Gobierno del Estado creo, de las últimas comunicaciones que tuvimos, estaban trazando con el Gobierno Federal, fondos para la renovación para la carretera de Pichilingue. Creemos que es muy importante la vista, pero también la seguridad […] lo último que he escuchado al respecto es hacer la carretera de cuatro carriles […] creemos que sería un gran acierto”, dijo.

El pregunta específica de este medio fue “¿qué compromiso tienen o pláticas con el Gobierno del Estado para tener una llegada más digna a la ciudad en cuanto a la carretera Pichilingue?”. Ante esto, el ejecutivo sólo habló de lo que ha escuchado sobre una supuesta inversión más no dijo que fuera un tema donde invertirían pese a que históticamente el puerto beneficia a Baja Ferries, una empresa que ha sido señalada por tener el monopolio comercial del Mar de Cortés ya que las empresas que laboran en la zona tienen relación directa o indirecta entre los socios y/o dueños; sin embargo Ruano Baqueiro sí se sintió agradecido con la inversión del Gobierno de BCS en la Terminal II “porque es la primera cara que damos al turista”

Dos detalles más pesa sobre esta empresa: a través de ella se presume que arriban delincuentes de otros estados, algunos detenidos en el punto de revisión tras la poca seguridad que brinda la empresa y el desplazamiento de transportistas locales.

Durante la última visita de Gerardo Ruiz Esparza, titular de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), a Baja California Sur (BCS), el gobernador del estado, Carlos Mendoza Davis, le solicitó públicamente la ampliación de las carreteras La Paz–Pichilingue y La Paz–Comondú, exponiendo además de causas de seguridad, motivos económicos y sociales.

En el caso de la carretera La Paz–Pichilingue, diariamente transitan 700 trailers, explicó el gobernador de BCS al secretario de Comunicaciones y Transportes, y se trata de “la carretera más transitada por la gente de La Paz” cuando se dirige a destinos de playa, “de manera tal que va siempre un carrito a medio andar en medio de 2 ó 3 trailers, con el riesgo que eso genera”, siendo “muchos los accidentes que han ocurrido porque la carretera no es de las especificaciones que requiere el tránsito de vehículos pesados”.

En razón de esto la SCT sólo se comprometió a revisar el tema.

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