HABLE COMO HABLA | ENTRE ENCUESTAS Y DESPENSAS
Anteriormente he mencionado que el Covid-19 ha dejado al descubierto el tipo de gobierno que tenemos en cuanto a sus acciones y reacciones. Es cierto que no ha sido fácil resolver sobre la marcha cuando se tiene una pandemia encima, aunque eso tampoco justifica a los gobiernos el abandono que sufren algunas familias, quienes no reciben apoyos y además no han podido trabajador o perdieron el empleo.
Aunque a muchos no les guste, durante esta pandemia la sociedad ha calificado -consciente o inconscientemente- las acciones políticas. Como lo digo siempre: la gente tiene memoria y el día de las elecciones recordarán quiénes estuvieron con ellos.
En este momento no importa de dónde venga la ayuda. ¿Qué importa si las despensas las entrega un diputado o un aspirante a diputado? Tienen el mismo fin y la ciudadanía las reclama derivado de las necesidades existentes al momento. Aunque reconozco que la entrega de despensas ha estado sometida al escrutinio público, no considero que esto sea un acto de mala fe por parte de los beneficiados ni de los medios de comunicación, más bien considero que ha sido un referente de cómo percibe el político al ciudadano a la hora de entregar el apoyo, y qué tipo de apoyos.
Derivado de lo anterior es que esta columna se titula “Encuestas y Despensas”. No sé si usted está de acuerdo, pero las encuestas son una radiografía del aquí y ahora, pero el paciente evoluciona y el día de las urnas -elecciones- se notará el agradecimiento que guarda. Es decir, quien hoy está con la ciudadanía, político o aspirante, será recompensado de una u otra forma, y por ello, aunque no queramos, la relación despensa -apoyo- y encuestas -aceptación- están fuertemente vinculadas.
Le pregunto a usted ¿en este momento en dónde se encuentran Alfredo Porras Domínguez, Ana Ruth García Grande, Lucía Trasviña Waldenrath e Isaías González Cuevas? ¿En qué zonas de Baja California Sur (BCS) han entregado ayuda? Sólo se aprovecharon de la gente y ahora no los voltean a ver con aquellos ojos de amor que lo hicieron para pedirles el voto.
Mientras estos personajes políticos descuidan el changarro nacen figuras como Alejandro Rojas Tirado, ese empresario incómodo para algunos derivado de la entrega de despensas y otros apoyos en especie que ha otorgado.
El posicionamiento de este empresario, quien tiene experiencia en las contiendas electorales, ha venido a la alza. Hay quienes critican el fin de la ayuda, aunque la mayor parte de esas personas que la critican no se ven en las colonias haciendo lo propio. Quizás, derivado de lo anterior, algunas encuestas lo posicionan en el gusto de la gente, aunque repito, las encuestas son un ejercicio del aquí y ahora, y para permanecer arriba es necesario no aflojar el paso.
Como lo dije anteriormente, no se trata de alabar a unos y criticar a otros, pero en verdad, ¿en dónde están los diputados federales y senadores cuando más se les necesita?
Quizás ese alto porcentaje de ciudadanos indecisos por quién votar terminen favoreciendo a los empresarios solidarios que los políticos de siempre que no supieron defender a sus representados.
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