HABLE COMO HABLA | VISITA ESTÉRIL
La visita del dirigente nacional de Morena a Baja California Sur no sirvió de nada. Es más, caldeó aún más los ánimos cuando dijo que no se repetiría la encuesta con la cual decidieron que Víctor Manuel Castro Cosío sería el candidato a gobernador, la misma encuesta que ha sido rechazada por gran parte de la militancia y actores políticos de la transformación de cuarta.
Resulta que Mario Delgado Carillo no supo hacerla de bombero y dejó peores las cosas. Por un lado, la mañana de su visita a La Paz, el senador Alejandro Rojas Díaz-Durán pateó el bote reconociendo que Morena cayó estrepitosamente una vez que se dio a conocer el nombre del candidato a la gubernatura. A través de un video, el senador morenista pidió que se repita la encuesta ya que había dudas en ella y se ve lejana la posibilidad de ganarle la elección a Francisco Pelayo a este paso.
Era obvio que el dirigente de Morena no hablaría mal la encuesta amañada con la que decidieron el candidato, digo, no sería tan pendejo de poner en dudo la “calidad” de este mecanismo si fue con el mismo que llegó al cargo que usurpa -digo, que ocupa-; pregúntele a Porfirio Muñoz Ledo, quien perdió la dirigencia del partido de una forma oscura.
Dos errores en uno cometidos por el dirigente nacional: invisibilizar las demandas de aquellos morenistas que se sienten afectados con la encuesta, así como culparlos de que con sus protestas están ayudando al PAN a refrendar el triunfo electoral el 6 de junio de 2021.
Lo que “ignora” este señor es que Morena no se cae sólo por la encuesta sino por una serie de abusos que este partido ha cometido desde lo nacional; el claro manejo de la pandemia es muestra del descrédito que tienen, sin dejar de mencionar que Baja California Sur es el segundo estado del país que reprueba lo que va de administración de Andrés Manuel López Obrador.
Ahora bien, el problema de Morena no es que el PAN y el PRI los venza en la elección, sino quedar como tercera fuerza política en el estado derivado de que “los pateados de Víctor” han recibido cobijo en el Partido Verde Ecologista de México. Es el caso de Armida Castro Guzmán, Rubén Muñoz Álvarez, Carlos José Van Wormer Ruiz, Sandra Moreno Vázquez, Eduardo “Yayo” Van Wormer, entre otros. Aunque no se sabe si todos han aceptado emigrar al Verde, de ser así, estaríamos hablando de la conformación de un bloque de enemigos de Víctor Castro en automático.
Si la visita del dirigente de Morena fue para levantarle la mano a Víctor Castro, ¿de qué sirvió?