Militantes estallan contra Morena por aplicar la “dedocracia”
¿Qué mensaje manda el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) al asegurar que no serán como el resto de los partidos y terminan haciendo lo mismo?.
Recientemente diversos militantes de “la esperanza de México”, como Andrés Manuel López Obrador llama a este partido, se han manifestado en contra de Víctor Castro Cosío, quien será candidato al Senado sin haber contendido en las encuestas internas de Morena.
El partido que promete acabar con “la mafia del poder” decidió beneficiar a ciertos militantes otorgando una candidatura directa, mientras que a otros los han enviado a comprobar su aceptación ciudadana mediante encuestas. En pocas palabras: Morena aplicó la “dedocracia”.
Así es. Morena eligió por “dedazo” a Castro Cosío como figura de valor preponderado y, por encima del resto de militantes y aspirantes, entregó una candidatura.
Pero es obvio que Morena tendría que recurrir a la “dedocracia”, ya que el líder de este partido a nivel estatal, Alberto Rentería Santana, era el contendiente de Castro Cosío, quien no goza de la misma aceptación ciudadana y política.
Como lo he dicho oportunamente, y sin intención de demeritar la lucha de nadie, pero a Morena arribaron “buitres”, quienes lejos de aportar al partido y las propuestas políticas, buscan no desaparecer y seguir en nómina porque no saben hacer otra cosa que “mamar” del erario público. Del mismo modo, tendría que recordar algo que he citado en anteriores ocasiones: Rentería Santana, David Moyrón Quiroz y Adrian Chávez son el zócalo de este partido; gente que levantó el nombre cuando nadie sabía los alcances que tendrían en la construcción de la marca política.
Ahora, resulta imposible creer que al interior de Morena tengan mayor peso figuras como Víctor Castro Cosío, Leonel Cota Montaño, o el mismo expriista Rubén Muñoz Álvarez. ¿Dónde ha quedado para Morena ese discurso político de ser la diferencia cuando recurren a las mismas prácticas de otros partidos para definir a sus candidatos?.
En lo personal, me resulta inconcebible que Alberto Rentería Santana no sea favorecido con una candidatura al senado, como el mismo la proyectaba a través de sus publicaciones; una persona que se ha convertido en marca política, que es referente de rebeldía… pero que en esta ocasión ha decidido ser “institucional”, como los priistas, y aguantar la burla de López Obrador.
Para quienes crean que estoy exagerando, recordemos que Morena quitó a Moyrón Quiroz la oportunidad de ser regidor en el Cabildo de La Paz ya que “sorteo” esa posición, la cual beneficio a Óscar Burgos Martínez, quien en ese momento no gozaba del posicionamiento mediático ni político. Esto es, no es la primera vez que Morena aplica mecanismos de “la mafia del poder”.
Mis respetos para Morena y casi toda su gente: se han convertido en un partido referente del cambio, aunque hoy la situación se centra en las malas prácticas que realiza su élite, olvidando que es la militancia quien pone y quita a sus candidatos, o por lo menos así debería de ser.
Ojalá que la rebeldía de Rentería Santana le dé para pelear por esa posición que se la ganó desde que decidió ser el portador legítimo de la marca “Morena”.