Recula el CIB ante visto bueno para uso de transgénicos en alimentos
La Paz, Baja California Sur.- Previo a la XVI Semana de Posgrados, la doctora en Ciencias en el Uso, Manejo y Preservación de los Recursos Naturales del Centro de Investigaciones Biológicas (CIB), Norma Yolanda Hernández Saavedra, reculó respecto al visto bueno que daba la institución al uso de transgénicos en alimentos.
Aseguró que las declaraciones de la doctora Gracia Alicia Gómez Anduro, investigadora titular de Agricultura en Zonas Áridas del CIB no representan la opinión de la institución y que ésta sólo lleva a cabo investigaciones para detectar el uso de transgénicos pero no para implementarlos, mucho menos para fijar una postura a favor o en contra.
Sin embargo, aunque Hernández Saavedra rehuyó a profundizar en el tema de transgénicos, dijo que el CIB no tiene una postura clara al respecto aunque reconoció que han pretendido socializar el tema.
Esta doctora aseguró que los transgénicos, además de no impactar en la salud, podrían evitar el uso de insecticidas, plaguicidas, y con ello disminuir la exposición de las personas que realizan fumigaciones, las cuales sí están relacionadas a casos de cáncer.
Asimismo, el uso de transgénicos favorecería las políticas públicas en cuanto a los programas de asistencia social, los cuales de no garantizar el abasto de insumos, generaría más pobreza, desnutrición y desigualdad.
“Para 2050, el consumo de alimento y la cantidad de territorio para su producción no será suficiente […] un problema real es que ya tenemos personas con hambre, la distribución del alimento […] si tomamos en cuenta el crecimiento poblacional y la falta de territorio apto, será mucho más la cantidad de gente con hambre […] el territorio disponible se va a ocupar para hacer vivienda, o para biocombustibles, o para otras cosas además de alimentos; un serio problema”, dijo.
Actualmente, aunque las personas han satanizado el uso de transgénicos, en Baja California Sur existen campos agrícolas que utilizan este tipo de semillas, además que las familias consumen a diario el tomate, la soya, papa, remolacha, arroz, canola, que se han reproducido bajo esta tecnología científica.
La doctora Hernández Saavedra fue cuestionada sobre dicho tema tras el cuestionamiento de los medios de comunicación, quienes creen que las investigaciones que han realizado, en muchos de los casos por miedo al escarnio público no se exponen abiertamente y quedan archivadas en cualquier escritorio con cajón.