En 3 años, en La Paz nacieron al menos 30 restaurantes: Canirac
La Paz, Baja California Sur.- Aunque el incremento en el precio del gas, la energía eléctrica, el Impuesto al Valor Agregado (IVA) y la gasolina ha mermado sus ingresos, en La Paz los restaurantes no cierran sus puertas, por el contrario, se multiplican, particularmente desde 2013 a la fecha, según refiere Lorena Hinojosa Oliva, presidenta en la capital de Baja California Sur (BCS) de la Cámara Nacional de la Industria de Restaurantes y Alimentos Condimentados (Canirac).
Esto se debe a dos situaciones primordiales, según analiza Hinojosa Oliva, al incremento en el turismo y al egreso de licenciados en gastronomía de las distintas escuelas de La Paz, logrando la apertura de establecimientos pertenecientes a cadenas restaurantes nacionales e internacionales y nuevos negocios manejados por sus propietarios.
“Hasta este momento no tenemos el cierre de ningún restaurante, al contrario, ha habido un boom desde que nos visualizan a la capital como un destino turístico de otro nivel, o que vamos caminando hacia llegar a ser un lugar turístico de muy buen nivel […] Ya los restaurantes de cadena están volteando a instalarse aquí, cosa que antes no existía […] Además, las escuelas de gastronomía están egresando a jóvenes con muchas ganas de poner su propia empresa, de no ir a incorporarse a otros negocios sino que ellos quieren poner su propio restaurante”, detalla la presidenta de la Canirac.
Incluso, consideró, se está “sobre ofertando mucho la preparación de alimentos […], en cada cuadra nos encontramos tres cuatro establecimientos”, sin embargo se trata de un buen signo económico, consideró, el cual a su vez “permite al consumidor tener mucha oferta a buen precio”.
Lorena Hinojosa Oliva, presidenta de la Canirac en La Paz
Finalmente, consideró que el incremento en el tipo de cambio monetario entre dólar y peso beneficia al sector restaurantero, pues se acerca la temporada de turismo internacional, del 15 de octubre al 15 de mayo, generando una derrama económica en divisas norteamericanas, mientras que el resto del año los restaurantes viven “de quincena”.
