Se acabó la “luna de miel” en el Cabildo de La Paz
La luna de miel que ha vivido el alcalde de La Paz, Armando Martínez Vega, con su Cabildo llegó a su fin y la relación será difícil de componer, esto tras los señalamientos que recibieron tres regidores por la supuesta contratación de personal que ha engrosado la nómina.
Los señalados fueron los panistas Pablo Ojeda Meza, Maximino Iglesias Caro y Alejandro Tirado Martínez, éste último dirigente del Partido Verde Ecologista de México (PVEM) en Baja California Sur, quienes ahora son “empalados” ante la opinión pública, quizás, para desviar la atención de otros temas pendientes en el XV Ayuntamiento de La Paz o muestra de quién ejerce el poder sobre ellos.
Regidor del PAN, Pablo Ojeda Meza
Estos regidores fueron exhibidos por tener a su cargo a 26 empleados, quienes devengan un sueldo promedio al mes de 43 mil pesos cada uno, aunque nadie dijo que la mayoría son empleados que pertenecen al Sindicato de Burócratas de La Paz y que fueron asignados por el propio Ayuntamiento.
Definitivamente estos regidores han considerado que tienen “fuego amigo“, o no tan amigo, pero tienen fuego; no es la primera vez que les pasa algo así.
Aunque sólo cuenta con 4 empleados y no fue precisamente señalado en este caso, el regidor del partido Movimiento Regeneración Nacional (Morena), José Óscar Martínez Burgos, se unió al descontento de sus colegas y asegura que el medio de comunicación que los ha expuesto es la “banda ancha” del Ayuntamiento, esto tras sus declaraciones en rueda de prensa, cuando no quiso revelar datos, pero aseguró, sabe qué empleado filtró la información con dolo al medio de comunicación y los intereses que guardan.
Además, Martínez Burgos dijo que los mismos datos que se publicaron sobre el personal, fue información que solicitó por escrito al Alcalde y hasta hoy no se le ha proporcionado, aunque sorpresivamente la prensa lo obtuvo antes.
Oscar Martinez Burgos
El equipo de trabajo de Armando Martínez y/o quien haya decidido enfrentarse a los regidores, no contemplaron varias cosas, entre ellas, que les esperan tres largos años trabajando juntos y que la vida siempre da revanchas, que siempre existirá el momento preciso para capitalizar errores y apretar el gatillo del “ajuste de cuentas“.
Si hay algo que creen tener claro los regidores es quién los expuso y con qué intención; y han endosado este cobro al Alcalde, quien deberá poner atención a cada paso que dé, porque no será cosa sencilla echarse encima a dos regidores de su partido y dos más de oposición; una más con la regidora del PRI, Rosalva Tamayo Aguilar, quien en cada oportunidad en las sesiones de Cabildo le recuerda a Armando Martínez sus promesas de campaña y la falta de resultados.
Rosalva Tamayo Aguilar
Esta regidora, quien es la única voz viva del PRI, solicitó hace menos de una semana, en Sesión de Cabildo, que el Alcalde diga a cuántos más piensa despedir del Ayuntamiento, aunque éste no pudo precisar su respuesta.
En el caso del regidor Pablo Ojeda, un hombre más mesurado y alejado de reflectores, seguramente atenderá la línea institucional de su partido para no llevar este conflicto más allá, sin embargo, sin restar méritos a los regidores de Morena y el PRI, Alejandro Tirado y Maximino Iglesias esperan el momento para salir al aire en diversos medios de comunicación y hablar sobre las irregularidades que existen en el Ayuntamiento en cuatro meses de iniciada la nueva administración y demostrar cómo se utiliza el recurso del Ayuntamiento.
Secretario de la Confederación Nacional de Cooperativas Pesqueras (Conacoop)
Alejandro Tirado no sólo es regidor, es el dirigente del PVEM en Baja California Sur y secretario de la Confederación Nacional de Cooperativas Pesqueras (Conacoop), además de dirigente estatal de la Federación de Cooperativas Pesqueras (Fedecoop), sin duda, un personaje político que tendrá más peso después de su regreso de la Ciudad de México, una vez que se reúna con la cúpula del partido y regrese con las líneas de acción en BCS; ¡con todo esto están poniendo en contra al alcalde de La Paz!.
En el caso de Iglesias Caro, exdirigente estatal del Sindicato de Burócratas, llegó al cargo no por su militancia en el PAN, sino por la invitación que recibió para fortalecer la estructura por los votos que representaba, aunque la memoria es corta y ahora es evidenciado.
Ya veremos qué pasa primero: hacen que los regidores “coman callados” o estos se unen para mostrar el músculo; es como cuando en la manada debes demostrar quien es el guía y quiénes serán guiados.
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