Los resultados de la prueba docente en BCS son intrascendentes para el resto del país: CNTE
La Paz, Baja California Sur.- Las opiniones del secretario de Educación en Baja California Sur (BCS), Héctor Jiménez Márquez, resultan intrascendentes ante las movilizaciones nacionales en contra de la aplicación del examen docente, asegura José Urbano Ochoa Romero, representante en el estado de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), luego de que el funcionario mostrara que los docentes disidentes han perdido credibilidad y capacidad de movilización, pues no lograron desestabilizar en la media península la prueba a los maestros, realizada casi por el 100 por ciento de los convocados.
“Los resultados de la medición punitiva, mal llamada evaluación, en Baja California Sur, son intrascendentes, por lo tanto quedan sin efecto los pronunciamientos de triunfalismo del titular de la Secretaría de Educación no Pública, Héctor Jiménez Márquez“, opinó Ochoa Romero, “toda vez que el padrón magisterial de la entidad no representa absolutamente nada para el grueso matricular a nivel nacional […], las decisiones sustanciales se determinan en el centro del país, donde la evaluación militarizada ha sufrido un rotundo golpe a pesar de los ciento sesenta y cuatro millones de pesos que ha empleado tanto en Michoacán y Oaxaca el gobierno de la república, estos invertidos en la judicialización de las sedes, traslado, comidas, hospedaje, sueldos a las fuerzas armadas, así como laptop para los acarreados”.
“La aplicación se hizo con toda tranquilidad”, ha dicho Jiménez Márquez, añadiendo que a pesar de los señalamientos de la CNTE y el Comité Ejecutivo Seccional Democrático (CED), la Secretaría de Educación ha sido “respetuosa de sus posturas públicas”, considerándolas únicamente mediáticas, pues “en la base ellos ya están convencidos de que ya no traen ningún liderazgo”.
“En el caso de Michoacán“, insiste José Urbano Ochoa ante el poco éxito en el estado, “fueron notificados seis mil ochocientos, presentándose sólo mil trescientos maestros a evaluarse, de los cuales completaron con acarreados de Antorcha Campesina, de niveles medio superior, así como arrastrados del propio gobierno, lo que indica que la evaluación militarizada recibió un duro golpe hacia la inversión de tantos millones de pesos que bien pudieron destinarlos a las instituciones escolares a las que tienen en el olvido”.
Y continúa, recordando que “en Oaxaca los que subieron evidencias fueron mil ochocientos, de los cuales seiscientos ochenta pertenecen a educación básica, cuatrocientos treinta de la sección cincuenta y nueve, y doscientos cincuenta traidores de la sección veintidós, es decir seiscientos ochenta de un total de ochenta mil maestros pertenecientes a la CNTE Oaxaca, restando además a los alumnos de nuevo ingreso del medio superior y superior y bachilleres generales, mismos que portaban playeras blancas expresando ‘vengo bajo protesta, si no me corren'”.
Cabe recordar que los profesores que realizaron el último examen en BCS, el pasado 21 de noviembre, coincidieron en que se trata de un documento ambiguo, aplicado en altos niveles de tedio e insuficiente para determinar su desempeño frente a grupo.
