Lo dije anteriormente: mientras dure la pandemia, y después de ella, sabríamos quiénes estuvieron con nosotros y quienes no. Durante casi cuarenta días, los habitantes de Baja California Sur (BCS) perdimos el ritmo habitual de nuestra vida y de nuestras actividades económicas por acatar las órdenes en materia de salud que emitió el Gobierno con el objetivo de evitar la propagación del Covid-19.

Este tiempo ha significado la desaceleración económica de BCS tras el cierre de todos los hoteles, restaurantes, y de todo aquel establecimiento comercial clasificado como no esencial. Al no haber ingresos económicos en los hogares escaseó el alimentos, el pago de los servicios básicos se complicó, algunas deudas -postergables y otras no- empezaron a ser el centro de plática en las familias; los gobiernos empezaron apoyar, pero la ayuda no alcanza para todos y las necesidades de alimentos -principalmente- no respetan códigos postales.

Mientras en los hospitales se forjan héroes anónimos -personal médico y administrativo- por entregar su vida a la atención de pacientes con Covid-19, fuera de los hospitales se forjaron nuevos héroes sin capa. De tres de ellos quiero hablarles.

El primero de estos héroes es Alejandro Rojas Tirado, un empresario sinaloense con pasaporte sudcaliforniano. A lo largo de varios años ha destinado parte de sus ganancias económicas a la sociedad, lo mismo entregando despensas -antes y durante la pandemia-, como promoviendo la siembra de árboles, asistencia médica, entrega de alimentos ganado, etcétera.

Durante esta pandemia ha recorrido diversas zonas de BCS para entregar, directamente en la mano de los beneficiados, despensas que van más allá de una obligación. A través de sus redes sociales, el presidente nacional de Yo soy Red 360 ha difundido cómo y en dónde los ciudadanos pueden acceder a la entrega de los apoyos.

El segundo héroes es Daniel Santacruz Rendón, cabeza principal del Movimiento Pensando en Ti. Sin tener una empresa propia, pero con el apoyo familiar y voluntarios, se ha dedicado ha labores ecológicas, de asistencia social y, ahora, en la entrega de despensas, a la donación de litros de gasolina para personal médico de instituciones públicas y privadas, además de tener diversas atenciones con quienes trabajan -en sus diversas modalidades- en la contención de la pandemia.

A Santacruz Rendón lo mismo se le ve limpiando arroyos que playas, o levantando colillas de la vía pública. Pero lo más importante es que no pertenece a una clase política que lo obligue a posar un interés por la conservación del medio ambiente y el bienestar común.

El tercero de estos héroes es Francisco Pancho Salcedo. Un empresario modesto, que lo mismo capitanea un proyecto que se convierte en copiloto de otro. Pancho es propietario de una banda sinaloense, responsable de un centro de rehabilitación para personas con adicciones y cabeza de asociación civil Sólo por Ayudar. Como decimos nosotros cuando nos referimos a una persona que conoce lo que es carecer de lo básico y luchar por conseguir estar mejor: viene desde abajo.

En las últimas semanas se ha sumado a la entrega de apoyos a las familias paceñas, sin dejar de lado que mantiene el control de sanidad y alimentación de las personas que son rehabilitadas en su centro. Para el Pancho no hay colores políticos. Lo mismo anda de metiche ayudando aquí o allá, pero dirigiendo la entrega de apoyos propios o de quien le solicita ayuda. Lo conozco desde que tenía un lavado de autos, y desde ahí ya pintaba para ser una persona recta. Como director de la banda dicen que es medio caimán, pero eso es obligatorio.

Siempre he dicho que en estos momentos los puntos cuentan dobles. Los sudcalifornianos no olvidarán quiénes estuvieron y quiénes no cuando más se necesito una mano solidaria.

Estoy consciente que héroes anónimos hay muchos, pero estos son mis nominados en cuestión de apoyo social, sin dejar de reconocer a los trabajadores del gremio de Salud, quienes nos han demostrado el verdadero valor de sus conocimientos adquiridos.

¿A quién nominarías como héroe anónimo o héroe sin capa?

Escríbeme a soy@giovannycarlos.com

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