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#OPINIÓN | INSABI, METAS SIN CUMPLIR

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No creo que exista algo más sensible que la salud de los mexicanos, un apartado que definitivamente la federación se propuso como meta para desarticular y lo logró.

En el 2006, el estado mexicano detectó que, para 50 millones de mexicanos sin alguna cobertura de salud, existían 3 aspectos importantes de cubrir:

  • Inequidades regionales en la cobertura y la calidad de los servicios.
  • La evaluación del desempeño de los estados o sus necesidades reales no se consideraban para distribuir los recursos.
  • No existian mecanismos de evaluación o de rendición de cuentas.

Bajo estas premisas, se diseña un sistema que permitía de origen, establecer los mecanismos que nos ayudarán a abordar estos retos. Cada uno, desde mi punto de vista, son el origen de mucho de los problemas del sistema, dado que la obligación del estado, es garantizar la salud de los mexicanos establecido en el Artículo 73 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos. esto sólo se puede lograr a través de:

  • Planeación del sistema de manera integral.
  • Establecimiento de indicadores.
  • Evaluación de las acciones.

Es decir, no hay manera de garantizar el acceso a la salud para todos, si no somos eficientes en la operación del sistema, esto necesariamente es; que los procesos estén alineados a indicadores de satisfacción y esto requiere un sistema eficiente y eficaz con calidad para el usuario.

Durante este periodo el sistema se fue adecuando y mejorando, logrando cubrir:

  • 294 atenciones en 1800 diagnósticos en todas las unidades afiliadas al Seguro Popular.
  • 66 enfermedades establecidas como un gasto catastrófico, donde se incluían sin costo para el usuario, por ejemplo, cáncer o infartos.
  • Y la atención a niños menores de 5 años en cualquier padecimiento.

El sistema se diseñó para atender la demanda del usuario, es decir, de lo que se enferman los mexicanos, o aquellas patologías que le generaban un gasto que podría afectar financieramente a una familia, así mismo, garantizar a las niñas y niños mexicanos menores de 5 años, su atención sin costo.

Los fondos creados para asegurar la atención de los mexicanos que no tienen opción de ser atendidos en el IMSS o ISSSTE, se diluyeron con la presente administración federal, fondos aportados por todos los mexicanos para que el estado mexicano diera cabal cumplimiento a su obligación, después de 3 años de un fallido esquema INSABI, que ha dejado no sólo sin recursos al gobierno para atender a los usuarios, sino que ha orillado a 73 millones de mexicanos sin la atención que se venía otorgando a adquirir por su propia cuenta medicamentos y atención medica en consultorios privados afectando directamente su bolsillo, y lo más complicado para todos los usuarios, al no contar con sistemas de control administrativos para el EFICIENTE uso del gasto – ahora el sistema casi el 75% de su gasto es asignado directamente – indicadores como tiempos de espera, surtimiento de recetas, están fuera de los niveles de indicadores internacionales.

En el 2017 no se surtían el 3.4% aproximadamente de las recetas, al 2021 ese porcentaje fue del 24%.

Este 2022, nos invitan a confiar en un nuevo sistema denominado IMSS-Bienestar, donde el sueño de DINAMARCA ahora sí será posible.

A solo meses que se concluya con la presente administración el sistema continuará colapsado y el estado mexicano sin poder cumplir con el mandamiento constitucional.

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Marco Puppo

Marco Puppo

Diputado federal del Partido Acción Nacional por Baja California Sur