Los maestros de BCS vuelven a las calles este 13 de julio
La Paz, Baja California Sur.- El Comité Ejecutivo Seccional Democrático (CESD) anuncia una nueva movilización en protesta contra la reforma educativa, la cual tendrá lugar este miércoles 13 de julio a partir de las 18:30 horas, partiendo del Parque Morelos hacia la explanada del Palacio de Gobierno, donde se instalarán módulos informativos para dar a conocer las afectaciones de la nueva ley educativa, particularmente, señalan, en lo que se refiere a “la privatización de la educación pública”, “la descompactación del concepto de Carrera Magisterial”, la “eliminación de escalafón” y “el aumento de horas a la jornada de trabajo de los [profesores] del nivel preescolar”.
El profesor Octavio Osuna Sánchez de la Vega, miembro de la Comisión Ejecutiva del CESD, denunció de nuevo en rueda de prensa el tráfico de 60 plazas administrativas en el Centro SEP de Baja California Sur (BCS), caso que el secretario de Educación, Héctor Jiménez Márquez, dijo, se comprometió a aclarar pero nunca lo hizo, ni en lo particular ni públicamente. Asimismo, también como parte de los motivos de la marcha, se refirió a los comisionados del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE) que continúan fuera de las aulas, “violando la ley”, así como a la falta de diálogo entre el Poder Ejecutivo y el gremio magisterial sudcaliforniano.
Por su parte, el profesor Vonniek Alexantonio Villavicencio Salazar, también miembro de la Comisión Ejecutiva del CESD, se refirió al intento del SNTE por contraponerse a la reforma educativa, lo que la disidencia observa como una muestra de “teatralidad” de su líder nacional, Juan Díaz de la Torre, pues el sindicato fue parte activa de la implementación de la reforma educativa, sostuvo, anotando que se trata de una estrategia del Gobierno de la República por confundir a la ciudadanía y simular consenso con los docentes que se manifiestan, lo que “reafirma el carácter oportunista, cínico y traidor” del SNTE.
Finalmente, el profesor Óscar Muñoz Lemus, igualmente miembro del CESD, reafirmó que la reforma educativa “viene a lesionar los derechos de todos los compañeros trabajadores, de todos los habitantes de este país, y en especial a los de la educación”, siendo el inicio de un modelo de contratación que sumirá al obrero en la “eventualidad perenne” y a la educación pública en educación privatizada.
“El caso de la Escuela 18 de Marzo, la descompactación, el incremento de horas a compañeras de preescolar, implican también parte de lo que nosotros señalamos, que es arrebatarle a la población un derecho para pretender convertirlo en una mercancía […] Esta es parte de la privatización, este arrancarle a la comunidad una escuela, cuando hay pocas evidencias de que deseen construir otros centros de trabajo, que son necesarios no sólo en el municipio, sino en todo el estado […], y más claro, en cuento a la privatización ya galopante en todo el país, que es la exigencia para que la nómina del magisterio sea únicamente por tarjetas, la tarjetización de nuestro salario, porque le otorga nuestros recursos, como nómina, a la rapiña de las corporaciones financieras, de las corporaciones bancarias, porque ellos nos cobran comisiones que nosotros no hemos autorizado, porque es nuestro salario […] Y también lo podemos observar en la privatización que significan esas evaluaciones que le han dicho a la sociedad que el magisterio se niega, nosotros señalamos que significan millones para unos organismos privados, pues no realiza tales exámenes la Secretaría de Educación Pública con nuestros impuestos, no, lo hacen a costa de un agravante más hacia los recursos que pudieran bien sostener escuelas como las que hoy pretenden destruir en nuestro estado”.
