México es un país que se caracteriza por su riqueza gastronómica, cultural y sus tradiciones, en Baja California Sur somos multiculturales ya que mucho de sus habitantes han llegado a nuestro estado con el sueño de una mejor vida, nos han compartido de sus tradiciones, usos y costumbres, por ello nuestro estado es rico por su gente, por su naturaleza, pero sobre todo por ser el mejor lugar para vivir.

Tan solo una de las actividades más importantes en BCS es el turismo, esta se complementa con los servicios prestados por restaurantes, hoteles, así como la venta de artesanías, no solo propias de la entidad, si no las de distintas regiones del país puesto que nuestra historia y cultura es grande y muy bella.

Nuestra gastronomía es rica por los productos del mar, productos de gran calidad y que no solo las y los sudcalifornianos degustan de estas riquezas, si no que también otras partes del mundo disfrutan de productos de primera calidad que se exportan para los más finos paladares del mundo. Y como no sentirnos orgullosos, si los sudcalifornianos vivimos en un paraíso rodeado de mar y desierto, un paraíso de la Baja California.

En estos tiempos donde la economía ha tenido grandes cambios, el comercio local sigue impulsando el desarrollo económico de cada uno de sus municipios y es de reconocer, que, gracias a estas actividades, a la calidad de sus productos y del buen servicio turistas locales, nacionales y del extranjero año con año siguen frecuentando los bellos rincones de tierras sudcalifornianas. Gracias a ello, nuestro estado ha tenido gran actividad turística esta temporada vacacional, lo que es bueno para las familias sudcalifornianas, ya que pueden vender sus productos y servicios, que con gran esfuerzo y amor realizan día a día.

Los gobiernos deben ser interlocutores para fomentar y promover la proveeduría interna, puesto que contamos con productos de primer nivel que pueden ser de gran apoyo al sector restaurantero y comercios; el gobierno debe involucrarse como interlocutores para que los productos de Baja California Sur se consuman en nuestro estado, ya que productos como lo son del valle de Santo Domingo pueden ser comercializados dentro de este sector, así como los productos del mar que como he mencionado llegan hasta los paladares más exigentes, sin duda somos un estado que tiene muchas virtudes, por ello, considero que el involucrarse las autoridades, puede ser de gran provecho para la economía local y un gran apoyo a las familias sudcalifornianos.

Cerrar el círculo virtuoso entre el sector primario de los productores agropecuarios y pesqueros, con el sector de servicios y turismo, que al estar en un territorio insular se vuelve una ventaja ante los proveedores locales, al ahorrar los fletes.

Como legislador e integrante de la comisión de turismo hemos trabajado en coordinación con las y los diputados de la LXV Legislatura para impulsar al turismo, así como en la búsqueda de alternativas para fortalecerlo, en nuestro estado contamos con dos pueblos mágicos, Loreto y Todos Santos, pueblos realmente mágicos y que son unas de las principales atracciones del turismo en nuestra entidad, turismo nacional e internacional quedan maravillados de su belleza natural y de la calidad de su gente, que busca día a día ser un destino lleno de alegría para sus visitantes, así mismo contamos con Santa Rosalía un bello pueblo lleno de historia y que día a día, su gente sigue impulsando su desarrollo y que busca potencializarse como un destino de historia; no nos cansaremos de insistir y seguir impulsando ante el Comité de Pueblos Mágicos de la Secretaría de Turismo Federal que se incluya a Santa Rosalia entre estos pueblo con encanto histórico, que tienen que contar al mundo su vida y su importancia historia en el sector minero. De la misma manera contamos con Oasis sudcalifornianos que fueron el origen de nuestras tribus indígenas y de los colonizadores, que dieron inicio a nuestra agricultura y ganadería.

Baja California Sur hoy ya no solo vende al mundo un destino turístico, ofrece experiencias a sus visitantes, instantes inolvidables, combinados con sus bellezas naturales y la calidez de su gente.

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