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La Paz, Baja California Sur.- Desde el paso del huracán Odile en 2014, el Fondo de Desastres Naturales (Fonden) ha aplicado en Baja California Sur (BCS) alrededor del 30 por ciento de los recursos aprobados para reconstruir la infraestructura dañada por el meteoro, sin embargo los constructores locales han avanzado más en algunas obras, por lo que la federación ya adeuda cerca de 300 millones a los empresarios sudcalifornianos, según revela Jorge Moore Valdivia, presidente estatal de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).

“Yo tengo el dato de que es el treinta por ciento lo que transfirió la federación, a mediados del año, entre julio y agosto, de la inversión total […] Nosotros hemos avanzado, hemos construido, más de ese treinta por ciento, por lo cual ya se está solicitando el pago de nuestras estimaciones”, señaló el constructor, subrayando que aún hay “acciones que no se han iniciado o algunas que están a medias, puesto que el Fonden no ha terminado de pagar o de transferir los recursos”.

Asimismo, el presidente en BCS de la CMIC dijo que el retraso en los pagos por parte del Fonden no afecta únicamente a la media península, sino que es una problemática que se repite en todo México.

“Es un problema no sólo del estado, sino nacional, he estado yendo a algunas reuniones a nivel nacional para enterarme y buscar la manera de que a través de la Cámara de la Construcción se puedan liberar los recursos por parte del Fonden a nuestro estado, y en todas las otras zonas del país es el mismo problema, todos están detenidos”.

En 2014, el director del Fonden, José María Tapia Franco, informó que los daños ocasionados por el huracán Odile en la entidad ascendieron a 7,863 millones de pesos, sin contar las afectaciones a la infraestructura de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

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