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OPINIÓN | ¡QUÉ COBRONES!

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¿Perdiste el sueño por deudas? Ponte a sacar las cuentas mágicas. Esas que siempre cuadra. Que prometen que un día saldremos de nuestras deudas eternas. Esas que solo sirven para conciliar el sueño. Creo que el 13 es de la mala suerte porque hasta ahí llega la quincena. El 14 ya sabe a “como quiera”, e incluso algunos privilegiados ese día reciben el amor de sus patrones. Pero para los días previos, las cuentas mágicas son casi terapéuticas. Si usted no coincide, me da una envidia “de la buena”. De esa que solo existe en los cuentos de Condorito.

El pasado 10 de noviembre tuvimos la oportunidad de hacer uno de esos ejercicios en compañía y de la mano de nuestra presidente municipal, Milena Quiroga. En una conferencia convocada a través de una sugerente mercadotecnia, prometiendo una carnicería a la altura de los juegos del calamar, nos cambia la “pichada” y realiza un análisis financiero preliminar sobre la condición paupérrima en que el municipio de La Paz le está recibiendo. Y entonces, como en los juegos del calamar, empieza a “repartir tarjetas” sin nombre a los morosos concursantes que somos toda la sociedad. Así que ahí lo tenemos: a diferencia de los discursos de campaña, donde los culpables tuvieron cargos públicos, ahora descubre que somos los jefes quienes tenemos toda la culpa. Dicen que al patrón nunca le debes decir que está equivocado. Pero tal vez no ve que la sociedad sea realmente su contratante. Solo así explicaría tremenda y desafortunada aventura, por más cierta que se quiera ver.

Y sí. Los números suenan mal. Habrá que ir pensando otros paraíso donde irse a vivir, antes del colapso final. Y arrancan los números al aire. Cantidades aquí y allá, sumas sin cuadrar, pero que serían la solución para la Paz; todo esto al tiempo que el morbo espectante por escuchar un nombre empezaba a convertirse en una mueca torcida. Para no aburrir más, el gran total en deudas de agua: 500 millones, más, menos. Sí, malas mañas de contador. De cualquier forma siempre podremos determinar el número que nos de la gana. Es nuestro poder. Y entonces, otro número impresionante: 1000 de prediales. Ahí caigo en cuenta que soy parte del problema, y pensé: ¡Claro, sin nombres! ¿Qué necesidad? Opté por no pagar por coraje cuando supe que el 30% era una cooperación directa a la Baja equivocada, a través de una agencia de cobros en la pasada administración. Sensible que es uno. Pobre pero chiquión.

1500 millones que deberían hacernos pensar que habrá un mejor futuro. Perdón… error de mala costumbre. Frase vetada. Finalmente, con tanto dinero pendiente de recaudar, podríamos incluso mandarlo a Suiza, a los bancos. O mejor aún, ser como ellos y hacer una réplica. La versión mexicana. Podíamos creer que el futuro nos llevaría a la Paz de la Esperanza…. Perdón, otra frase vetada. Ni eso nos dejan los políticos que se van, ¿Cierto? Cuando uno es bruto y persistente, ya ni para que me disculpo por el error. Pero regresando, los números nos hacen creer que un buen municipio es posible. ¡Que La Paz es posible! (en referencia al slogan actual del municipio, no a la ONG colombiana). Esa enorme cantidad es casi la recaudación total del municipio en un año completo. Riqueza total.

¡Oh, no! En México las buenas noticias duran lo que pasas de un bache a otro. Se vienen las malas sobre nosotros. Para obtener esa recaudación, el municipio tiene que dar convenios, facilidades, estímulos, incobrables y gastos de cobranza para hacer manita de cochi a algunos. Y como ya tengo así las manos, mejor mañana me pongo al corriente, por cierto. Ojalá muchos lo pudieramos hacer y ayudar. Una vez aportado mi granito de arena para que no tachen de inconciente social, prosigo con las malas cuentas. Como contador, los números mágicos siempre son tétricos. Creo que por eso nos odian. O quiero pensar que solo por ello. Cálculo rápido: mucho del dinero adeudado son accesorios, multas, etc. Siempre se reducen por estímulos. Apoyos para motivar, y demás. Pienso en una gran recaudación total de 1,200 millones, como algo excelente. De nuevo, redondeado siempre, para que se parezca a mi. 1000 millones. Aún creo que ese número ni Obama lo tiene a su disposicón ahorita.

Pero entonces viene el quitarisas. Algo así como el VAR hoy día en el fútbol. La deuda total del municipio de 2000 millones. Es decir, un déficit neto probable de 1000 millones, pagadero ya. Aquí puedo ver de todos aquellos que ya estrenaban lámparas en sus colonias; que no sufrirían mas por baches; ver sus sueños caer. El 17% del total de los ingresos que recabará en todo su primer periodo de tres años la administración municipal (quien soy yo para coartar los sueños de repetir, si el trabajo lo avala). Y este número podría parecer salvable, nuevamente números mágicos, pero hay más malas noticias. Más del 40% de los ingresos están comprometidos en sueldos y salarios, otro 10% en estímulos, compensaciones, cuotas sindicales, prestaciones sociales. Nos quedan 1500 millones por gastar en los tres años, a los niveles actuales de recaudación (33%). Prácticamente todo proyecto recortado.

Esto dejaría un municipio sin un peso. Aunque sin deudas. Cosa que no puede suceder, porque hay que dar servicios, operar oficinas, dar apoyos sociales, hacer campañas de firmas… perdón, esto último no. Todo eso con 1500 millones en tres años es imposible. Pero, si aún cree que podemos conciliar el sueño en el municipio dando como válidos los números mágicos, habría que pensar en los otros deficits que no queremos platicar. Como serían las casi 8000 lámparas de alumbrado, tan necesarias, y que requieren una inversión cercana a los 160 millones. O la reparación de uno que otro hoyo en el asfalto, reparación de fugas de agua, y un enorme etcétera. Me encantaría poder presentar un ejercicio mas completo, pero como siempre, la información es terriblemente escaza.

La solución, si me permite un poco de seriedad por alguna vez en mi vida, será primero participar en la contribución y olvidarnos ya de quienes son los culpables de lo que tenemos. Queda claro que no se va a investigar eso. Como lo veo, de la contabilidad solo van a revisar el balance general, en el apartado de deudores. Y no tocarán el estado de resultados, especialmente en las secciones de gastos. Nuevamente, discurso de campaña. Pero la culpa es nuestra por creer que, un día, cuando se alinien las estrellas y chivas gane al mismo tiempo, nacerá un político sin lazos con el pasado. Porque los únicos culpables de las malas finanzas públicas es el ciudadano irresponsable, moroso, mala paga y que debería estar tras las rejas contando cigarrillos. Cierto, creo que no puedo ser serio jamás con tanta frustración.

Pero una exigencia puntual y total a esta nueva administración municipal. Como siempre, la pagan los que, hasta ahora, no pueden ser señalados culpables: una vez que el número ha sido dado a conocer, de 2000 millones de deuda, la eficiencia de la gestión del XVII ayuntamiento será en base a que ese número se vea reducido. La ventaja que ya tienen en la mente la austeridad pregonada. Esperemos que no sea un slogan. Y como alguna vez escribí ya, tendremos que tener paciencia y ayudar. No debe descartar el ayuntamiento propiciar e incluir a la iniciativa privada en labores públicas, para mayor generación de ingresos, así como candados más estrictos. No podemos ponernos esos moños. Porque el bolsillo no nos da ya para nuevas contribuciones. Con todo este desolador panorama, deseo honestamente que todos quienes laboran en el municipio y que seguramente están tan asustados como yo, puedan encontrar que la Paz es posible, al menos cuando vayan a descansar durante la noche. Si llegó hasta aquí, como siempre, meine aufrichtige Entschuldigung (mis sinceras disculpas en suizo-alemán… después de RM, pensaba que ya sería lo correcto).

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